Mazda se prepara para lanzar la tercera generación del CX-5 2026, con el objetivo de competir con el nuevo Toyota RAV4. La compañía se ha esforzado constantemente por lograr una imagen premium, como lo demuestran sus últimos modelos, como el CX-50, el CX-70 y el CX-90. En 2024, las ventas de Mazda en Estados Unidos alcanzaron los 424.382 vehículos, superando a marcas como Volvo, Audi, Mercedes-Benz y BMW.
A pesar de ser el modelo más vendido de Mazda, el CX-5 experimentó una caída de casi 13% en las ventas, totalizando 134.000 unidades, a medida que el CX-50 y otros modelos ganaron popularidad. Reconociendo la necesidad de una actualización, Mazda está desarrollando el CX-5 de tercera generación, cuya segunda generación debutó en 2016.
Las recientes fotos espía han permitido vislumbrar el diseño del nuevo CX-5, lo que ha inspirado representaciones digitales de creadores como el canal de YouTube AutoYa. Estas representaciones sugieren que Mazda optará por un enfoque de diseño evolutivo en lugar de una renovación completa. Se especula con la introducción de un sistema de propulsión híbrido enchufable y posiblemente una variante totalmente eléctrica, aunque esto último parece menos probable.
En el interior, los expertos anticipan un tablero minimalista con una configuración de doble pantalla para el grupo de instrumentos y el sistema de infoentretenimiento, junto con materiales mejorados. Mazda pretende posicionar al nuevo CX-5 frente a competidores de primera línea como el Toyota RAV4 y el Honda CR-V, que recibirán importantes actualizaciones este año.
Mientras Mazda se prepara para presentar el CX-5 de tercera generación, los entusiastas esperan ansiosamente detalles oficiales sobre su diseño, características y capacidades de rendimiento.